Phelps, nacido en Baltimore hace 27 años, confesó, en el programa que estuvo a punto de dejar la natación definitivamente en 2009, por los problemas de depresión que sufrió después de que fuera sorprendido fumando marihuana y la noticia diera la vuelta al mundo, siendo suspendido varios meses y menguados sus ingresos publicitarios.
Phelps, que según su entrenador Bob Bowman está en un gran momento, ha trabajado en el gimnasio más que nunca consciente de que estos de Londres serán su última gran competición. El apodado "tiburón de Baltimore" tiene el reto de defender sus títulos olímpicos obtenidos en Atenas'2004 y Beijing'2008, en total suma 14 oros y 2 bronces, y con 16 medallas olímpicas aspira a convertirse en el mayor medallista olímpico de siempre. Ahora el record lo ostenta la gimnasta ucraniana Larisa Latynina, que bajo bandera soviética acumuló 18 medallas entre 1956 y 1964.
Phelps explicó que en su decisión ha influido el cansancio acumulado durante los últimos años por las exigencias que supone la alta competición. "He podido ir a maravillosas ciudades en mis viajes y no he podido verlas. Veo el hotel y el jardín, eso es todo. Después de estos Juegos, voy a ir y hacer lo que quiera hacer", afirmó Michael Phelps.
En clave española y barcelonesa, es una mala notícia, ya que no volverá a los Mundiales de Barcelona el año que viene. Recordemos que su consagración internacional se produjo en el verano del 2003 en la Piscina del Palau Sant Jordi, al ganar 4 oros, cuando contaba solamente 18 años.
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